Las torrijas son un postre tradicional español que se prepara durante la Semana Santa, aunque también se pueden disfrutar durante todo el año. Las torrijas se hacen a partir de pan duro remojado en leche y luego frito. En esta receta, le daremos un toque de vainilla para darle un sabor extra delicioso.
Ingredientes:
Instrucciones:
Corta el pan en rebanadas de aproximadamente 2 centímetros de grosor. Si el pan es muy duro, remójalo en agua tibia durante unos minutos para ablandarlo un poco.
En una olla, calienta la leche, el azúcar, la rama de canela y la esencia de vainilla a fuego medio hasta que el azúcar se disuelva por completo. Luego, retira del fuego y deja enfriar durante unos minutos.
Remoja las rebanadas de pan en la mezcla de leche durante unos segundos para que se empapen bien.
Bate los huevos en un plato hondo. Escurre las rebanadas de pan remojadas y pásalas por el huevo batido para que se cubran bien.
En una sartén grande, calienta suficiente aceite de oliva para que las torrijas se puedan freír. Asegúrate de que el aceite esté caliente antes de añadir las torrijas.
Fríe las torrijas hasta que estén doradas por ambos lados. Cuando estén listas, retira las torrijas de la sartén y colócalas en un plato con papel absorbente para quitar el exceso de aceite.
Espolvorea un poco de azúcar sobre las torrijas y sírvelas inmediatamente.
¡Listo! Ya tienes unas deliciosas torrijas con sabor a vainilla para disfrutar con tus amigos y familiares. Estas torrijas son perfectas para acompañar con un café o una taza de té. ¡Buen provecho!
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