El Día de Todos los Santos, también conocido como el Día de los Muertos, es una festividad tradicional que se celebra en varios países de América Latina, especialmente en México. Esta festividad es una oportunidad para honrar y recordar a los seres queridos que han fallecido, y una parte importante de las celebraciones es la preparación de comidas especiales para compartir en familia. Una de las recetas más representativas del Día de Todos los Santos es el tradicional Pan de Muerto, un delicioso pan dulce adornado con formas que simbolizan la vida y la muerte. A continuación, te ofrecemos una receta para preparar este exquisito pan en casa y disfrutarlo en esta ocasión tan especial.
Ingredientes:
Para la masa:
Para la decoración:
Instrucciones:
En un tazón grande, mezcla la harina, el azúcar y la sal. Haz un hueco en el centro y añade la levadura seca, la leche tibia y los huevos. Mezcla bien hasta obtener una masa suave.
Agrega la mantequilla a temperatura ambiente y amasa la masa en una superficie enharinada durante unos 10-15 minutos, o hasta que esté suave y elástica.
Agrega la esencia de azahar (si la estás usando), la ralladura de naranja y la ralladura de limón a la masa. Amasa durante unos minutos más para incorporar bien los ingredientes.
Forma la masa en una bola y colócala en un tazón ligeramente engrasado. Cubre con un paño húmedo y deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
Precalienta tu horno a 180°C.
Una vez que la masa haya reposado y haya duplicado su tamaño, divídela en dos partes. Una parte será para la base del Pan de Muerto y la otra para las decoraciones.
Para la base del Pan de Muerto, forma una bola grande y colócala en un molde redondo engrasado. Para las decoraciones, utiliza la otra parte de la masa para hacer huesos, cráneos, lágrimas o cualquier forma que desees para adornar el pan.
Coloca las decoraciones sobre la bola grande de masa en el molde, y presiónalas ligeramente para que se adhieran bien.
Pinta todo el pan con mantequilla derretida y luego espolvorea azúcar encima para darle un aspecto dorado y brillante.
Con una brocha, pinta las decoraciones con huevo batido para que adquieran un aspecto dorado al hornearse.
Hornea
© Sólo Útil. Todos los derechos reservados. Design by HTML Codex