El rodaballo al horno con mejillones y almejas es un plato delicioso y sofisticado que impresionará a cualquier invitado en una cena. Es una receta bastante sencilla de hacer, pero requiere de algunos ingredientes frescos y de buena calidad para conseguir un sabor excepcional.
Ingredientes:
Preparación:
Precalienta el horno a 200°C.
Limpia bien el rodaballo quitando las escamas, las tripas y las branquias. Haz unos cortes diagonales en la piel para que se cocine de manera uniforme.
En una fuente para horno, pon una base de cebolla, ajo y los pimientos cortados en tiras finas. Coloca el rodaballo encima y añade por encima un poco de aceite de oliva, sal y pimienta.
Hornea el rodaballo durante unos 20 minutos.
Mientras tanto, en una sartén grande, saltea el resto de la cebolla y el ajo en aceite de oliva hasta que estén dorados. Añade el tomate cortado en cubos y cocina durante unos minutos.
Agrega los mejillones y las almejas a la sartén y vierte el vino blanco por encima. Tapa y cocina durante unos 5 minutos hasta que las conchas se abran.
Cuando el rodaballo esté listo, sácalo del horno y coloca los mejillones y las almejas por encima, junto con el jugo que han soltado. Espolvorea un poco de perejil picado.
Vuelve a introducir el rodaballo al horno durante unos minutos más para que se integren todos los sabores.
Sirve el rodaballo con los mejillones y las almejas por encima y un poco de la salsa que ha quedado en la fuente.
¡Y ya está! Tu rodaballo al horno con mejillones y almejas está listo para ser disfrutado. Acompáñalo con un buen vino blanco y disfruta de una comida exquisita.
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