Título: Delicioso y esponjoso: la receta infalible para un queque perfecto
Introducción:
Si hay algo que puede alegrar cualquier ocasión, es un delicioso queque esponjoso. Ya sea para el desayuno, la merienda o un postre después de la cena, este clásico pastel siempre es bien recibido. En este artículo, te presentaremos una receta infalible que te permitirá preparar un queque esponjoso y delicioso en la comodidad de tu hogar. ¡Prepara tus utensilios de cocina y manos a la obra!
Ingredientes:
Instrucciones:
Precalienta tu horno a 180°C (350°F). Prepara un molde para queque engrasándolo y enharinándolo ligeramente.
En un tazón grande, tamiza la harina junto con el polvo de hornear. Agrega la sal y mezcla bien. Este paso ayudará a incorporar aire a la mezcla y garantizará una textura esponjosa.
En otro tazón, bate la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla suave y esponjosa. Puedes usar una batidora eléctrica a velocidad media para facilitar el proceso.
Agrega los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición. Asegúrate de que cada huevo esté completamente incorporado antes de añadir el siguiente.
Agrega la esencia de vainilla y mezcla nuevamente.
Añade la mitad de la harina tamizada a la mezcla de mantequilla y huevos. Mezcla a velocidad baja hasta que esté casi incorporada.
Agrega la mitad de la leche y mezcla nuevamente. Repite el proceso con el resto de la harina y la leche.
Una vez que todos los ingredientes estén incorporados, aumenta la velocidad de la batidora a media-alta y bate durante unos 2 minutos adicionales. Esto ayudará a desarrollar el gluten de la harina y a aumentar la esponjosidad del queque.
Vierte la masa en el molde preparado y asegúrate de nivelarla para obtener una cocción uniforme.
Lleva el molde al horno precalentado y hornea durante aproximadamente 45-50 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro, este salga limpio.
Una vez que esté listo, retira el queque del horno y deja que se enfríe en el molde durante unos 10 minutos. Luego, transfiérelo a una rejilla para que se enfríe por completo.
¡Y listo! Ahora puedes disfrutar de un delicioso queque esponjoso casero. Puedes servirlo tal cual o acompañarlo con tu glaseado o decoración favorita. Este queque se mantendrá fresco durante varios días si se almacena adecuadamente en un recipiente hermético.
Conclusión:
La receta del queque esponjoso es un clásico que vale la pena tener a mano. Con ingredientes simples y un proceso sencillo, puedes crear un pastel delicioso y esponjoso que deleitará a todos. Sigue los pasos cuidadosamente, prestando atención a las proporciones y tiempos de cocción, y estarás listo para disfrutar de un queque casero que te hará sentir orgulloso. ¡Buen provecho!
© Sólo Útil. Todos los derechos reservados. Design by HTML Codex