El guiso de conejo con alioli es un plato delicioso y muy popular en la cocina mediterránea. Este plato es perfecto para los días fríos y lluviosos, ya que su sabor y aroma te transportarán a una tarde de invierno en la comarca.
Ingredientes:
Preparación:
Comienza por preparar el alioli. En un mortero, machaca los dientes de ajo con una pizca de sal. Agrega el huevo y mezcla bien. Luego, añade poco a poco el aceite de oliva mientras sigues mezclando con una cuchara de madera. Continúa añadiendo aceite hasta que consigas la textura deseada. Reserva el alioli en la nevera.
En una cazuela grande, calienta un poco de aceite de oliva y dora los trozos de conejo a fuego medio-alto. Una vez que estén dorados, retíralos y reserva.
En la misma cazuela, agrega la cebolla, el pimiento verde y el pimiento rojo picados en trozos pequeños y sofríe hasta que estén dorados. Agrega el tomate picado y las hojas de laurel y cocina durante unos minutos.
Vuelve a agregar el conejo a la cazuela, salpimenta al gusto y añade el vaso de vino blanco. Deja que el vino se evapore a fuego medio-bajo durante unos 5 minutos.
Añade el caldo de pollo hasta que cubra completamente el conejo y deja que el guiso se cocine a fuego lento durante 45 minutos, removiendo de vez en cuando.
Sirve el guiso de conejo caliente y acompaña con una cucharada de alioli por encima de cada plato.
Este guiso de conejo con alioli es una deliciosa opción para disfrutar en una tarde de invierno o en una reunión con amigos y familiares. ¡Anímate a probarlo y disfruta de su sabor y aroma mediterráneo!
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