La crema quemada de miel y azafrán es un postre delicioso y elegante que combina los sabores dulces y ligeramente amargos de la miel y el azafrán con la suavidad de la crema y la textura crujiente de la capa de azúcar caramelizado. A continuación, te presentamos una receta sencilla para prepararla en casa.
Ingredientes:
Preparación:
En una olla mediana, calienta la crema a fuego medio hasta que empiece a hervir. Retira del fuego y deja reposar durante unos minutos.
Agrega la miel y el azafrán a la crema caliente. Revuelve bien y deja que la mezcla se infunda durante unos 10-15 minutos.
En un tazón grande, bate las yemas de huevo hasta que estén bien mezcladas.
Agrega lentamente la mezcla de crema y miel a las yemas de huevo, batiendo constantemente para evitar que las yemas se cocinen.
Vierte la mezcla de crema y huevo en moldes individuales para flan.
Hornea los moldes a baño maría en un horno precalentado a 180°C durante unos 30-40 minutos, o hasta que la crema esté cuajada y ligeramente dorada en la superficie.
Retira los moldes del horno y deja que se enfríen a temperatura ambiente. Luego, refrigera los moldes durante al menos dos horas o hasta que la crema esté bien fría.
Justo antes de servir, espolvorea una capa uniforme de azúcar granulada sobre la superficie de cada molde.
Con un soplete de cocina, derrite el azúcar hasta que esté dorado y crujiente.
Sirve la crema quemada de miel y azafrán inmediatamente, disfrutando de su delicioso sabor y textura.
¡Que disfrutes de tu crema quemada de miel y azafrán casera!
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