coulant de chocolate blanco

Delicioso Coulant de Chocolate Blanco: Una Tentación Irresistible

El coulant de chocolate blanco es una exquisitez culinaria que combina la suavidad y dulzura del chocolate blanco con el sorprendente corazón fundido de chocolate derretido en su interior. Este postre se ha convertido en un clásico favorito en la repostería, y su preparación, aunque requiere cierta precisión, no es complicada. A continuación, te presento una receta paso a paso para preparar este delicioso coulant de chocolate blanco:

Ingredientes:

Instrucciones:

Preparación de los moldes: Comienza precalentando el horno a 200°C (390°F). Luego, engrasa los moldes para coulant con mantequilla y espolvorea un poco de harina sobre ellos para evitar que el coulant se pegue al desmoldarlo. Sacude el exceso de harina.

Derretir el chocolate blanco y la mantequilla: En un recipiente apto para microondas o a baño maría, coloca el chocolate blanco troceado junto con la mantequilla. Derrite ambos ingredientes suavemente hasta obtener una mezcla homogénea. Si utilizas el microondas, caliéntalo en intervalos cortos para evitar que el chocolate se queme.

Batir los huevos y el azúcar: En otro recipiente, bate los huevos junto con el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa y blanquecina.

Mezcla de los ingredientes: Une la mezcla de chocolate blanco y mantequilla derretidos con la mezcla de huevos y azúcar batidos, revolviendo suavemente para integrar bien los ingredientes.

Añadir harina y sal: Agrega la harina y una pizca de sal a la mezcla. Remueve con delicadeza hasta que todos los ingredientes estén incorporados, procurando no batir demasiado para evitar la formación de burbujas.

Llenar los moldes: Vierte la masa del coulant de chocolate blanco en los moldes previamente preparados, llenándolos hasta aproximadamente 2/3 de su capacidad, dejando espacio para que crezcan durante la cocción.

Tiempo de cocción: Coloca los moldes sobre una bandeja de horno y hornea durante unos 12-15 minutos, dependiendo de la potencia de tu horno. El objetivo es que los bordes estén firmes, pero el centro todavía esté ligeramente tembloroso.

Desmolde y disfruta: Una vez horneados, retira los moldes del horno con cuidado. Deja reposar durante un minuto y, con la ayuda de un plato, desmolda los coulants con cuidado. El corazón derretido de chocolate blanco en el centro se revelará de manera irresistible.

Decoración (opcional): Puedes espolvorear un poco de azúcar glasé o acompañar los coulants con helado de vainilla, frutas frescas o alguna salsa de frutas rojas.

El coulant de chocolate blanco es una experiencia gastronómica única y deliciosa. Su textura cremosa y su sabor dulce te conquistarán en cada bocado. Sorprende a tus invitados o disfrútalo en una ocasión especial. ¡No te resistas a esta tentación culinaria!