¡Disfruta de una deliciosa y refrescante compota helada con esta fácil receta que te enseñaremos a continuación! La compota helada es una opción perfecta para esos días calurosos de verano o simplemente como un postre delicioso y saludable para cualquier momento del año. Esta receta combina la dulzura de las frutas con la frescura del helado, y es una opción deliciosa y nutritiva para toda la familia.
Ingredientes:
Instrucciones:
Paso 1: Preparar las frutas Si utilizas frutas frescas, lávalas y córtalas en trozos pequeños. Si utilizas frutas congeladas, déjalas descongelar ligeramente para que sean más fáciles de mezclar.
Paso 2: Cocinar las frutas En una cacerola mediana, coloca las frutas cortadas, el azúcar, el jugo de limón, la esencia de vainilla y el agua. Cocina a fuego medio-alto hasta que las frutas estén tiernas y el azúcar se haya disuelto por completo, aproximadamente de 5 a 7 minutos. Remueve ocasionalmente para evitar que las frutas se peguen en el fondo de la cacerola.
Paso 3: Enfriar las frutas Retira la cacerola del fuego y deja que las frutas se enfríen a temperatura ambiente durante unos minutos. Luego, refrigera las frutas en la cacerola durante al menos una hora, o hasta que estén bien frías.
Paso 4: Mezclar con el helado Una vez que las frutas estén frías, retíralas del refrigerador. Coloca las frutas cocidas en un procesador de alimentos o licuadora y mézclalas hasta obtener una consistencia suave. Luego, agrega el helado de vainilla o el helado de tu elección y mezcla nuevamente hasta obtener una mezcla homogénea.
Paso 5: Servir y disfrutar Vierte la compota helada en tazones individuales o copas de helado. Puedes decorar con algunas frutas frescas adicionales si lo deseas. Sirve de inmediato y disfruta de esta deliciosa y refrescante compota helada.
Consejos adicionales:
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