La salsa gravy es una receta clásica que se ha utilizado durante siglos para acompañar carnes y asados en muchas partes del mundo. Es una salsa rica y deliciosa que complementa perfectamente el sabor de la carne y realza la experiencia gastronómica. En este artículo, vamos a enseñarte la receta tradicional de salsa gravy y cómo prepararla.
Ingredientes:
Instrucciones:
En una cacerola mediana a fuego medio, derrite la mantequilla.
Agrega la cebolla y el ajo picados y cocina hasta que estén dorados, removiendo ocasionalmente. Este paso puede tardar de 5 a 8 minutos.
Agrega la harina y el tomillo fresco y mezcla bien con la mantequilla y la cebolla. Continúa cocinando durante 1-2 minutos más, removiendo constantemente, para que la harina se cocine.
Agrega el caldo de res poco a poco, mientras revuelves constantemente, para evitar que se formen grumos. Sigue agregando el caldo hasta que la salsa tenga la consistencia deseada. Si la salsa es demasiado espesa, agrega más caldo.
Reduce el fuego a bajo y deja cocinar a fuego lento durante unos 10-15 minutos, o hasta que la salsa tenga la consistencia deseada. La salsa debe tener un color marrón oscuro y ser suave y sedosa.
Una vez lista, ajusta la sazón con sal y pimienta negra recién molida al gusto.
Para servir, vierte la salsa gravy caliente sobre la carne y disfruta.
Conclusión:
La salsa gravy es una receta clásica que complementa perfectamente la carne y realza la experiencia gastronómica. Es fácil de hacer y puede ser utilizada con una amplia variedad de carnes y asados. La receta tradicional que hemos compartido contigo en este artículo es una excelente opción para acompañar tus platos de carne. ¡Disfrútala!
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