El salmorejo es una deliciosa sopa fría originaria de Andalucía, España, que se elabora con tomates frescos, ajo, pan y aceite de oliva. En esta receta, te enseñaremos cómo preparar una versión de salmorejo crudites, que se enriquece con vegetales crujientes para darle un toque extra de textura y sabor.
Ingredientes:
Instrucciones:
Lava los tomates y córtalos en cuartos. Pela y corta el ajo en trozos pequeños. Pon ambos ingredientes en un bol grande y añade el vinagre y la sal. Remueve bien y deja macerar durante al menos una hora.
Corta el pan duro en trozos pequeños y ponlo en un bol con agua. Deja que se empape durante unos 10 minutos.
Lava y pela las zanahorias y córtalas en tiras finas. Lava los pimientos y córtalos en tiras también. Pela y corta la cebolla en juliana. Corta el pepino en rodajas finas.
Escurre el pan empapado y añádelo al bol con los tomates y el ajo. Añade también el aceite de oliva y tritura todo con una batidora de mano hasta que quede una crema suave y homogénea.
Añade las hojas de menta fresca y tritura de nuevo hasta que queden bien integradas en la crema.
Sirve el salmorejo en cuencos individuales y decora con las tiras de zanahoria, pimiento y cebolla, y las rodajas de pepino. Sirve bien frío.
Este salmorejo crudites es una deliciosa variante del clásico salmorejo andaluz, que se enriquece con los vegetales crujientes y refrescantes. La menta fresca añade un toque aromático que combina a la perfección con el sabor intenso de los tomates y el aceite de oliva. Pruébalo en días calurosos de verano y disfruta de una comida ligera y saludable. ¡Buen provecho!
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