El queso fresco es un tipo de queso suave y cremoso que se utiliza en muchas recetas de cocina, desde ensaladas hasta tacos y tortas. A continuación, te presentaré una receta sencilla para hacer queso fresco en casa, sin necesidad de equipo especializado.
Ingredientes:
Instrucciones:
Vierte la leche en una olla grande y caliéntala a fuego medio-alto hasta que alcance los 85°C. Usa un termómetro de cocina para medir la temperatura y remueve la leche constantemente para evitar que se pegue al fondo de la olla.
Una vez que la leche alcance los 85°C, retira la olla del fuego y agrega el jugo de limón, removiendo bien para que se mezcle con la leche.
Deja reposar la mezcla durante 10-15 minutos para que el jugo de limón acidifique la leche y se forme el cuajo. Verás que la leche comenzará a separarse en sólidos (el cuajo) y líquidos (el suero).
Coloca un colador grande sobre un recipiente y forra el colador con una gasa o un paño de queso. Vierte la mezcla de leche y jugo de limón en el colador y deja que se escurra el suero durante 15-20 minutos.
Una vez que el queso fresco haya terminado de escurrir, retira la gasa o el paño y coloca el queso en un tazón. Agrega sal al gusto y mezcla bien.
El queso fresco está listo para usar en tus recetas favoritas. También puedes guardar el queso en un recipiente hermético en el refrigerador durante varios días.
Conclusión:
Hacer queso fresco en casa es una tarea fácil y gratificante. Con esta receta simple, puedes preparar un queso suave y cremoso que puedes utilizar en una variedad de recetas. Además, al hacerlo en casa, puedes estar seguro de que estás utilizando ingredientes de alta calidad y sin aditivos artificiales. ¡Disfruta de tu queso fresco casero!
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