pastel de tres leches

Delicioso Pastel de Tres Leches: Una Receta Irresistible

El pastel de tres leches es un postre clásico y sumamente popular en muchos países de América Latina. Su sabor dulce y textura suave lo convierten en una elección perfecta para ocasiones especiales o simplemente para deleitar a tus seres queridos con un capricho culinario. En este artículo, te presentaremos una receta fácil y deliciosa para preparar un pastel de tres leches que seguramente será un éxito en cualquier evento.

Ingredientes:

Para la mezcla de tres leches:

Para la cobertura:

Instrucciones:

Precalienta el horno a 180 °C (350 °F). Engrasa y enharina un molde para pastel de 9x13 pulgadas.

En un tazón mediano, tamiza la harina, el polvo de hornear y la sal. Reserva.

En otro tazón grande, bate los huevos y el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa y de color amarillo pálido. Agrega la leche y el extracto de vainilla, y mezcla bien.

Incorpora gradualmente los ingredientes secos tamizados a la mezcla de huevos y azúcar. Mezcla con suavidad hasta obtener una masa homogénea.

Vierte la masa en el molde preparado y extiéndela de manera uniforme. Lleva al horno precalentado y hornea durante aproximadamente 25-30 minutos, o hasta que un palillo insertado en el centro salga limpio.

Mientras el pastel está en el horno, prepara la mezcla de tres leches. En un tazón grande, combina la leche condensada, la leche evaporada, la crema de leche (nata) y el extracto de vainilla. Mezcla hasta obtener una consistencia suave y homogénea.

Una vez que el pastel esté listo, sácalo del horno y déjalo enfriar durante unos minutos. Luego, utiliza un tenedor o un palillo de dientes para hacer varios agujeros en la parte superior del pastel.

Vierte lentamente la mezcla de tres leches sobre el pastel, asegurándote de que se absorba bien. Puedes usar la parte posterior de una cuchara para ayudar a distribuir la mezcla uniformemente.

Cubre el pastel con papel film y déjalo enfriar en el refrigerador durante al menos 2 horas, o preferiblemente durante la noche, para que absorba completamente la mezcla de tres leches.

Antes de servir, prepara la cobertura batiendo la crema para batir (nata) con el azúcar glas y el extracto de vainilla hasta obtener una consistencia firme.

Retira el pastel del refrigerador y cubre la superficie con la crema batida.

¡Listo! Corta el pastel en porciones y sírvelo frío. Puedes decorarlo con frutas frescas, coco rallado o espolvorear un poco de canela en polvo por encima para añadir un toque extra de sabor.

El pastel de tres leches es un postre que mejora con el tiempo, por lo que es aún más delicioso al día siguiente. Asegúrate de guardarlo en el refrigerador si tienes sobras. ¡Disfruta de este dulce y cremoso deleite que seguramente conquistará los paladares de todos!