El pastel de cabracho es un plato típico de la gastronomía del norte de España, especialmente de la región de Galicia. Este pastel de pescado es una deliciosa mezcla de cabracho, pan, huevos, leche y especias, que se hornea hasta que queda dorado y crujiente por fuera y suave y jugoso por dentro. Es una receta perfecta para una cena o un almuerzo especial y es muy fácil de preparar en casa. A continuación, te dejamos los pasos para hacer tu propio pastel de cabracho.
Ingredientes:
Preparación:
En primer lugar, precalienta el horno a 180 grados.
Limpia el cabracho y quítale las espinas y la piel. Puedes pedir en tu pescadería que te lo hagan para facilitarte el trabajo. Trocea la carne del cabracho en pequeños trozos y reserva.
En una sartén, calienta un poco de aceite de oliva y añade la cebolla y el ajo picados. Sofríe a fuego medio hasta que estén dorados.
Añade el cabracho troceado y saltea durante unos minutos hasta que esté bien cocido.
Retira del fuego y añade el pan duro en trozos y la leche. Deja que el pan se empape durante unos minutos.
En un bol grande, bate los huevos con una pizca de sal, pimienta, perejil picado, pimentón dulce y nuez moscada. Añade la mezcla de cabracho, pan y leche y mezcla bien.
Vierte la mezcla en un molde para horno previamente engrasado y hornea durante unos 45 minutos o hasta que esté dorado y cocido por dentro.
Deja enfriar antes de desmoldar. Sirve frío o caliente, según tu preferencia.
Este pastel de cabracho es un plato muy versátil que puedes servir como aperitivo o como plato principal acompañado de una ensalada fresca. Si lo prefieres, puedes añadir otros ingredientes como gambas, mejillones o pulpo para darle un toque diferente. ¡Buen provecho!
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