Los panecillos suecos, también conocidos como "kanelbullar", son un delicioso pan dulce originario de Suecia. Estos panecillos suaves y esponjosos están llenos de canela y azúcar, y son el acompañamiento perfecto para una taza de café o té. A continuación, te presento una receta para hacer panecillos suecos en casa:
Ingredientes:
Para el glaseado:
Instrucciones:
En un tazón grande, mezcla la harina, la levadura seca activa, la sal y 80 gramos de azúcar.
Agrega la leche tibia, la mantequilla derretida y los huevos. Mezcla bien hasta que se forme una masa suave y pegajosa.
Amasa la masa durante unos 10 minutos hasta que se vuelva suave y elástica.
Coloca la masa en un tazón engrasado, cubre con una toalla y deja reposar durante una hora en un lugar cálido.
Mientras tanto, mezcla 1 cucharada de canela molida y 75 gramos de azúcar morena en un tazón pequeño. Reserva.
Una vez que la masa ha subido, colócala sobre una superficie enharinada y amasa durante un minuto.
Estira la masa en un rectángulo de 30x40 centímetros.
Espolvorea la mezcla de canela y azúcar sobre la masa.
Enrolla la masa firmemente en un rollo.
Corta el rollo en 12-15 piezas iguales y colócalos en una bandeja para hornear previamente engrasada o cubierta con papel pergamino.
Cubre la bandeja con una toalla y deja que los panecillos se levanten durante 30 minutos en un lugar cálido.
Precalienta el horno a 200 grados Celsius.
Batir el huevo y la leche juntos en un tazón pequeño.
Cepilla los panecillos con la mezcla de huevo y leche.
Espolvorea azúcar perlado sobre los panecillos.
Hornea los panecillos durante 10-12 minutos o hasta que estén dorados.
Sirve caliente con una taza de café o té.
¡Y listo! Con esta receta tendrás unos deliciosos panecillos suecos para compartir con tus seres queridos.
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