La mantequilla de Roquefort es una deliciosa adición a cualquier mesa de queso, ya sea como untable en panes y galletas, o como ingrediente en salsas y platillos. Aunque puede parecer complicado de preparar, en realidad es bastante sencillo y requiere pocos ingredientes. A continuación, te presentamos una receta fácil para preparar mantequilla de Roquefort en casa.
Ingredientes:
Instrucciones:
En un tazón mediano, mezcla la mantequilla y el queso Roquefort hasta que estén bien combinados. Si el queso Roquefort es demasiado firme para mezclar, puedes ablandarlo a temperatura ambiente durante unos minutos o calentarlo ligeramente en el microondas.
Agrega la cucharada de vino blanco seco y mezcla bien hasta que la mantequilla tenga una consistencia suave y cremosa.
Sazona la mantequilla con sal y pimienta negra al gusto. Ten en cuenta que el queso Roquefort ya es bastante salado, así que es posible que no necesites mucha sal adicional.
Coloca la mantequilla de Roquefort en un recipiente hermético y guárdala en el refrigerador durante al menos una hora para que se endurezca y los sabores se mezclen.
Una vez que la mantequilla se haya enfriado y solidificado, sácala del refrigerador y deja que alcance la temperatura ambiente antes de servirla. Puedes servirla en un plato para untar o en pequeñas porciones individuales.
¡Listo! Ya tienes tu mantequilla de Roquefort casera para disfrutar con tus quesos favoritos o para darle un toque especial a tus platillos. Recuerda guardar la mantequilla sobrante en el refrigerador y consumirla dentro de una semana.
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