El guiso de patatas con costillas es un plato tradicional y reconfortante que ha sido parte de la gastronomía de muchos países durante generaciones. Es una receta fácil de hacer y muy sabrosa que se puede servir como plato principal o acompañamiento.
Ingredientes:
Preparación:
Pelar y picar la cebolla y los ajos en trozos pequeños. Cortar los pimientos en tiras finas y los tomates en cubos.
En una sartén grande o cazuela, calentar aceite de oliva a fuego medio-alto. Añadir las costillas y dorarlas por ambos lados. Retirarlas de la sartén y reservar.
En la misma sartén, añadir la cebolla y los ajos picados y saltear hasta que estén dorados. Añadir los pimientos y los tomates y continuar salteando hasta que los pimientos estén blandos y los tomates hayan liberado su jugo.
Agregar la hoja de laurel, el pimentón y mezclar bien. Añadir las costillas doradas y mezclar nuevamente.
Pelar y cortar las patatas en rodajas gruesas. Añadirlas a la cazuela junto con el caldo de pollo o agua suficiente para cubrir todos los ingredientes. Salpimentar al gusto.
Cocinar a fuego medio-bajo durante aproximadamente 30 minutos, o hasta que las patatas estén tiernas y el caldo se haya reducido a una salsa espesa.
Servir caliente, decorado con perejil picado y acompañado de un buen pan para mojar en la salsa.
Este guiso de patatas con costillas es un plato sustancioso y lleno de sabor que seguramente se convertirá en uno de tus favoritos. Pruébalo y sorprende a tu familia y amigos con tus habilidades culinarias. ¡Buen provecho!
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