croquetas de pollo caseras sin bechamel

Título: Deliciosas Croquetas de Pollo Caseras: Sin Bechamel y Fácil de Preparar

Introducción: Las croquetas de pollo son un plato clásico y delicioso que todos disfrutamos. Sin embargo, muchas recetas tradicionales requieren la preparación de una bechamel, lo que puede ser un proceso largo y complicado. ¡Pero no te preocupes! Hoy te presentamos una receta alternativa de croquetas de pollo caseras sin bechamel, que te sorprenderá por su sencillez y sabor. ¡Prepárate para disfrutar de unas croquetas crujientes y llenas de sabor!

Ingredientes:

Instrucciones:

En una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega la cebolla picada y el ajo, y cocínalos hasta que estén tiernos y translúcidos.

Añade el pollo desmenuzado a la sartén y mezcla bien con la cebolla y el ajo. Cocina durante unos minutos para que los sabores se mezclen. Agrega sal y pimienta al gusto. Retira la mezcla del fuego y déjala enfriar.

Una vez que la mezcla de pollo esté fría, forma las croquetas. Puedes darles forma redonda, ovalada o la que prefieras. Asegúrate de que las croquetas no sean demasiado grandes para que se cocinen de manera uniforme.

Prepara una estación de empanizado colocando la harina, los huevos batidos y el pan rallado en recipientes separados.

Toma una croqueta de pollo y pásala por la harina, asegurándote de que esté completamente cubierta. Luego, sumérgela en los huevos batidos y finalmente pásala por el pan rallado, asegurándote de que quede bien empanizada. Repite este proceso con todas las croquetas.

Calienta suficiente aceite vegetal en una sartén grande a fuego medio-alto. Asegúrate de que el aceite esté lo suficientemente caliente antes de freír las croquetas. Puedes hacer una prueba colocando un trozo pequeño de pan rallado en el aceite; si se dora rápidamente, el aceite está listo.

Fríe las croquetas de pollo en lotes, asegurándote de no sobrecargar la sartén. Cocina las croquetas durante aproximadamente 3-4 minutos por cada lado, o hasta que estén doradas y crujientes.

Una vez que las croquetas estén doradas, retíralas del aceite y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa.

¡Listo! Sirve las croquetas de pollo caseras sin bechamel con una salsa de tu elección, ya sea salsa de tomate, alioli o cualquier otra salsa que te guste.

Conclusión: Las croquetas de pollo caseras sin bechamel son una alternativa rápida y sabrosa para disfrutar de este plato clásico. Con una textura crujiente por fuera y un interior jugoso lleno de sabor, estas croquetas son perfectas como aperitivo, plato principal o incluso como opción para los más pequeños. ¡No dudes en probar esta receta y sorprender a tus seres queridos con unas deliciosas croquetas de pollo caseras!