costillas al vino tinto

Receta de Costillas al Vino Tinto: Un Delicioso Plato para Disfrutar

Las costillas al vino tinto son un plato clásico y reconfortante que combina la jugosidad de las costillas con el rico sabor del vino tinto. Esta receta es perfecta para aquellos que disfrutan de sabores intensos y deseosos de impresionar a sus comensales con una comida sabrosa. A continuación, te presento una receta fácil de seguir para preparar estas deliciosas costillas al vino tinto.

Ingredientes:

Instrucciones:

Preparar las costillas: Comienza sazonando las costillas con sal y pimienta al gusto. Asegúrate de cubrir bien todas las costillas con los condimentos. Este paso es esencial para realzar el sabor de la carne.

Dorar las costillas: En una olla grande o una sartén profunda, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio-alto. Agrega las costillas y dóralas por todos los lados hasta que estén ligeramente doradas. Este proceso ayuda a sellar los jugos dentro de la carne y le da un bonito color.

Añadir las verduras: Retira las costillas doradas de la olla y resérvalas. En la misma olla, agrega la cebolla, el ajo, las zanahorias y el apio. Cocina las verduras durante unos minutos hasta que se ablanden ligeramente y se vuelvan fragantes.

Deglasear con vino tinto: Añade el vino tinto a la olla y raspa el fondo con una cuchara de madera para soltar todos los sabores caramelizados. Deja que el vino hierva durante unos minutos para reducir un poco el alcohol.

Cocinar las costillas: Coloca las costillas reservadas en la olla y agrega las hojas de laurel, el romero y el tomillo. Asegúrate de que las costillas estén sumergidas en el líquido tanto como sea posible. Si es necesario, agrega un poco de agua o caldo de carne.

Cocinar a fuego lento: Reduce el fuego a medio-bajo y cubre la olla con una tapa. Deja que las costillas se cocinen a fuego lento durante aproximadamente 2 horas o hasta que la carne esté tierna y se desprenda fácilmente del hueso. Durante la cocción, verifica el nivel de líquido y, si es necesario, añade un poco más de vino tinto o caldo.

Servir y disfrutar: Una vez que las costillas estén listas, retíralas de la olla y colócalas en un plato. Puedes filtrar el líquido restante en la olla para obtener una salsa más fina o servirlo directamente como está. Acompaña las costillas con la salsa y disfruta de este exquisito plato.

Estas costillas al vino tinto son ideales para servir con puré de patatas, verduras al vapor o una ensalada fresca. El vino tinto aporta un sabor profundo y complementa maravillosamente la jugosidad de las costillas de cerdo. Prepáralas para una comida especial o para sorprender a tus seres queridos con un plato delicioso. ¡Buen provecho!