La corvina es un pescado blanco de sabor suave y textura firme que se encuentra en muchos lugares del mundo. Una de las maneras más deliciosas de prepararla es con mantequilla negra, una técnica francesa que implica calentar la mantequilla hasta que se dore y tenga un sabor a nuez.
Aquí te presento una receta sencilla para preparar corvina a la mantequilla negra:
Ingredientes:
Instrucciones:
Precalienta el horno a 200°C.
Sazona los filetes de corvina con sal y pimienta al gusto. Pasa cada uno por harina para cubrirlo completamente.
Derrite la mantequilla en una sartén grande a fuego medio. Cocina la mantequilla hasta que se dore y tenga un aroma a nuez. Esto puede tomar unos minutos, así que asegúrate de no quemar la mantequilla.
Coloca los filetes de corvina en la sartén con la mantequilla caliente. Cocina durante 2-3 minutos por cada lado o hasta que estén dorados. Transfiere los filetes a una fuente para horno.
Agrega el jugo de limón a la mantequilla restante en la sartén y revuelve para combinar.
Vierte la mantequilla con limón sobre los filetes de corvina en la fuente para horno.
Hornea durante 10-12 minutos o hasta que la corvina esté completamente cocida.
Sirve la corvina caliente con la salsa de mantequilla negra por encima y decora con perejil picado.
Esta receta es fácil de preparar y el resultado es un plato elegante y delicioso. La mantequilla negra le da un sabor rico y profundo a la corvina, lo que la convierte en una opción perfecta para una cena especial o para impresionar a tus invitados. ¡Buen provecho!
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