El roscón de Reyes es un postre tradicional de la Navidad que se consume en muchos países de habla hispana, especialmente en España. Este delicioso pan dulce tiene una forma circular y está decorado con frutas confitadas y azúcar glas. Si estás pensando en preparar un roscón de Reyes casero este año, aquí te presentamos algunos consejos, recomendaciones y dudas que te ayudarán a hacerlo con éxito.
Para preparar un roscón de Reyes necesitas los siguientes ingredientes: harina de fuerza, levadura fresca, azúcar, leche, huevos, mantequilla, agua de azahar, ralladura de naranja y limón, sal y frutas confitadas y azúcar glas para decorar.
Para hacer la masa del roscón de Reyes, primero debes mezclar la harina con la levadura fresca y el azúcar. A continuación, añade la leche tibia, los huevos, la mantequilla derretida, el agua de azahar, la ralladura de naranja y limón y la sal. Mezcla todo bien hasta obtener una masa homogénea y amasable. Amasa durante unos 10-15 minutos hasta que la masa esté suave y elástica. Deja reposar la masa durante 1-2 horas, hasta que doble su volumen.
Una vez que la masa ha levado, hay que darle forma al roscón. Para ello, haz un agujero en el centro de la masa y ve estirando la masa hacia los lados, formando un anillo. Coloca el roscón sobre una bandeja de horno y déjalo reposar durante otra hora.
Una vez que el roscón ha reposado, decóralo con frutas confitadas y azúcar glas. Puedes usar rodajas de naranja, limón, cerezas, higos, almendras, etc. Para hacer la masa brillante, puedes pincelarla con huevo batido antes de decorarla.
Precalienta el horno a 180ºC y hornea el roscón durante unos 15-20 minutos, o hasta que esté dorado y cocido por dentro. Una vez que el roscón está cocido, déjalo enfriar sobre una rejilla antes de servirlo.
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