En la Edad Media, el cordero era una de las carnes más populares en Europa, y se usaba en numerosas recetas para preparar platos deliciosos y satisfactorios. Uno de los platos más emblemáticos de la época era el guiso de cordero, que se cocinaba lentamente con una variedad de verduras y hierbas aromáticas para crear un sabor intenso y satisfactorio. A continuación, te presentamos una receta de guiso de cordero medieval que podrás preparar en casa.
Ingredientes:
Instrucciones:
En una cacerola grande, calienta un poco de aceite de oliva a fuego medio-alto. Agrega la carne de cordero y salpimenta al gusto. Sofríe hasta que esté dorada por todos lados, luego retira de la cacerola y reserva.
En la misma cacerola, agrega las cebollas, las zanahorias y el apio. Sofríe durante unos 5 minutos, hasta que las verduras estén doradas y fragantes.
Agrega el vino tinto a la cacerola y raspa el fondo con una cuchara de madera para liberar los sabores. Cocina a fuego medio-alto durante unos minutos, hasta que el vino se haya reducido a la mitad.
Agrega las ciruelas pasas, el caldo de pollo, el romero, el tomillo y las hojas de laurel a la cacerola. Mezcla todo bien y lleva a ebullición.
Reduce el fuego a bajo y agrega el cordero dorado. Cubre la cacerola y deja que el guiso se cocine a fuego lento durante 2 horas, hasta que la carne esté tierna y se desprenda fácilmente.
Sirve caliente, acompañado de arroz, pasta o pan. ¡Disfruta!
Este guiso de cordero medieval es un plato clásico y sabroso que se ha pasado de generación en generación. Si estás buscando una cena reconfortante y satisfactoria que te transporte a otra época, ¡prueba esta receta en casa!
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