La focaccia es un pan plano tradicional italiano que se ha popularizado en todo el mundo. Es fácil de hacer en casa y se puede personalizar con diferentes ingredientes para hacerla más sabrosa. En esta receta, te enseñaremos cómo hacer una deliciosa focaccia con cebolla y queso grana padano.
Ingredientes:
Instrucciones:
En un recipiente grande, mezcla la harina con la levadura seca de panadería y una pizca de sal. Agrega el agua tibia y el aceite de oliva. Mezcla bien todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea.
Amasa la masa durante unos 10 minutos hasta que se vuelva suave y elástica. Forma una bola y colócala en un recipiente ligeramente aceitado. Cubre con una toalla húmeda y deja reposar durante 1 hora en un lugar cálido y sin corrientes de aire.
Mientras tanto, corta las cebollas en rodajas finas y fríelas en una sartén con un poco de aceite de oliva hasta que se doren ligeramente. Reserva.
Precalienta el horno a 220 grados Celsius. Engrasa una bandeja para hornear con aceite de oliva.
Una vez que la masa haya duplicado su tamaño, colócala en la bandeja para hornear y extiéndela con las manos para que cubra toda la superficie de la bandeja. Cubre la masa con las rodajas de cebolla y espolvorea el queso grana padano rallado sobre la cebolla.
Hornea la focaccia durante unos 20-25 minutos, o hasta que esté dorada y crujiente. Retira del horno y deja enfriar durante unos minutos antes de servir.
¡Y ya está! Ya has preparado una deliciosa focaccia con cebolla y queso grana padano. Puedes disfrutarla sola o acompañada de una ensalada para una comida rápida y sabrosa. ¡Buen provecho!
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