La crema de contrastes es una sopa cremosa que combina sabores y texturas diferentes para crear una experiencia única en cada bocado. Esta receta es perfecta para aquellos que quieren experimentar con nuevos sabores y para aquellos que buscan algo reconfortante y sabroso para una cena o almuerzo.
Ingredientes:
Instrucciones:
En una olla grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Agrega la cebolla y el ajo y cocina hasta que estén dorados y suaves.
Agrega las zanahorias y los champiñones picados y cocina durante unos minutos hasta que estén suaves.
Añade el caldo de pollo y deja que la sopa hierva a fuego lento durante unos 10 minutos.
Agrega las espinacas y cocina por otros 5 minutos.
Retira del fuego y deja enfriar un poco.
Con una licuadora, mezcla la sopa hasta que esté suave. Si prefieres una sopa con textura, puedes dejar algunos trozos de verduras sin licuar.
Vuelve a calentar la sopa a fuego medio y agrega la crema de leche. Revuelve bien y cocina durante unos minutos más.
Agrega sal y pimienta al gusto.
Sirve caliente y espolvorea queso parmesano rallado sobre cada porción.
La crema de contrastes es una sopa deliciosa y nutritiva que se puede disfrutar como un plato principal o como un acompañamiento para una cena especial. Esta receta es fácil de preparar y los ingredientes se pueden ajustar según los gustos personales. ¡Buen provecho!
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