Título: Deliciosa y Ligera: Receta de Bechamel de Calabacín Baja en Calorías
Introducción: La bechamel es una salsa clásica y versátil utilizada en numerosas recetas, pero su alto contenido calórico puede ser un obstáculo para aquellos que buscan mantener una dieta equilibrada. Sin embargo, hoy te traigo una versión ligera y saludable de esta deliciosa salsa, utilizando como base el calabacín. Esta receta de bechamel de calabacín baja en calorías te permitirá disfrutar de los sabores cremosos sin preocuparte por las calorías adicionales. ¡Vamos a descubrir cómo prepararla!
Ingredientes:
Instrucciones:
Lava y corta los calabacines en trozos pequeños. Puedes dejar la piel si prefieres una bechamel con un color más verde, ya que contiene nutrientes adicionales.
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Agrega el ajo picado y cocínalo hasta que esté fragante, sin dejar que se queme.
Añade los trozos de calabacín a la sartén y cocínalos hasta que estén tiernos, revolviendo ocasionalmente. Esto debería llevar alrededor de 8-10 minutos.
Mientras tanto, en una cacerola aparte, calienta la leche desnatada a fuego medio hasta que esté caliente pero no hirviendo. Mantenla caliente mientras preparas el resto de la salsa.
Una vez que los calabacines estén tiernos, retira la sartén del fuego y colócalos en una licuadora o procesadora de alimentos. Tritura los calabacines hasta obtener una mezcla suave y homogénea.
En la misma sartén utilizada anteriormente, agrega la harina de trigo integral y cocínala a fuego medio-bajo durante aproximadamente un minuto, revolviendo constantemente. Esto ayudará a espesar la bechamel.
Vierte lentamente la leche caliente sobre la harina en la sartén, batiendo vigorosamente para evitar la formación de grumos.
Agrega la mezcla de calabacín triturada a la sartén con la leche y mezcla bien todos los ingredientes. Continúa cocinando a fuego medio-bajo hasta que la salsa se espese, esto debería llevar unos 5 minutos.
Si deseas, sazona la bechamel de calabacín con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada para realzar los sabores. Prueba la salsa y ajusta los condimentos según tu preferencia.
¡Y eso es todo! Ahora tienes una deliciosa bechamel de calabacín baja en calorías lista para ser disfrutada. Puedes utilizarla como base para lasaña, gratinados de verduras, sobre pastas o cualquier otra preparación donde normalmente usarías bechamel convencional. Esta versión light te permitirá disfrutar de tus comidas favoritas sin comprometer tu salud.
Recuerda que puedes experimentar y agregar tus propias variaciones a esta receta básica. ¡Buen provecho!
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