El miso es un condimento japonés hecho de soja fermentada, sal y un hongo llamado koji. Tiene un sabor único y salado, y se utiliza en una amplia variedad de platos, desde sopas hasta aderezos para ensaladas.
Para preparar miso en casa, necesitarás los siguientes ingredientes:
Remoja la soja en agua durante al menos 8 horas o durante la noche. Luego, escurre y enjuaga bien la soja.
Cocina la soja en agua durante 2 horas, o hasta que esté suave. Escurre la soja cocida y resérvala.
Muele el koji en un mortero hasta que tenga una consistencia fina. Agrega la sal y mezcla bien.
En un tazón grande, mezcla la soja cocida, la mezcla de sal y koji y 4 tazas de agua. Mezcla todo bien.
Coloca la mezcla en un recipiente de vidrio grande y cubre con una toalla de cocina limpia. Deja que fermente durante 6 meses en un lugar oscuro y fresco.
Después de 6 meses, coloca la mezcla en una licuadora y mezcla hasta que esté suave y homogénea. Pasa la mezcla por un colador fino para quitar cualquier grumo.
Ahora que tienes miso casero, aquí hay algunas formas de utilizarlo:
Sopa de miso: agrega una cucharada de miso a un caldo caliente y agrega tofu, cebolla verde y setas.
Aderezo de ensalada: mezcla miso con aceite, vinagre y miel para hacer un aderezo delicioso para ensaladas.
Marinado: mezcla miso con aceite y especias para marinar carne, pescado o tofu.
Salsa: mezcla miso con un poco de agua para hacer una salsa salada para mojar verduras o fideos.
El miso es un condimento versátil que agrega un sabor único y delicioso a una variedad de platos. Prueba esta receta de miso casero y experimenta con diferentes formas de utilizarlo en la cocina.
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